«Supongo que la mitad de mis posibles lectores, sobre poco más o menos, sabrá tanto o más que yo de Buridán y su asno. Pero como el título de este mi primer artículo va a ser el mantenido antetítulo de la serie que proyecto (y que Dios nos coja a todos confesados, amén), pienso que no ha de sobrar a la mitad ignara el que le explique, un poco sobre los dedos, de qué va la cosa.El venerable maestro Juan Buridán, nacido en el Artois cuando moría el siglo XII y muerto, Dios sabrá dónde, después de 1358, abanderado de los terministas y dos veces rector de la Universidad de París, hizo en vida más que suficientes cosas como para quedar en el recuerdo, con frecuencia ingrato, de los tratados de filosofía. Sobre asociar la lógica y la gramática, empeño que no le han sabido agradecer bastante los fanáticos del primer Wittgenstein, Buridán formuló con sorprendente acierto los principios básicos de la cinemática cuando aseguraba que el impetus de un móvil es proporcional a la cantidad de materia que contiene y a la velocidad que le comunica su motor originario…»

El sábado 26 de Marzo de 1983, Camilo José Cela, publicaba en el periódico El Pais un artículo que bautizó como El asno de Buridán, un proyecto que se prolongaría hasta el 15 de Junio de 1985. Artículos en los que retrata la actualidad del modo en el que solamente C.J.C., sabe hacerlo. Posteriormente todos estos artículos se editarían en forma de libro. Este volumen reune los artículos originales de la edición impresa del citado periódico y los que, por diversas causas, (muy pocos) no se pudieron conseguir, la Fundación Camilo José Cela nos ayudó muchísimo y muy amablemente nos envió un archivo de cada original para poder hacer una copia.

Previamente se usó papel onglet para unir los artículos entre sí (cada 4) para  preservar el formato original del artículo, y posteriormente se utilizó escartivanas de papel Fabriano c/crema para confeccionar los cuadernillos y hacer una….

Encuadernación Bradel con lomo en piel de vacuno y tapas en piel de cabra. Incisiones pintadas con acrílicos y mosaicos en piel de vacuno. Cabezadas en piel de cabra y guardas en papel imitación de ante gofrado. Caja a juego en papel Lokta tramado translúcido y papel Kozo (Japón).

Colección particular de D. Evaristo Lemos